lunes, 28 de enero de 2008

Manual para disfrutar de la vida (I)


Domingo, 27 de enero. Javier apenas lleva seis días respirando por sí mismo y hoy asiste a su primera comida familiar. La cita, en el Marítimo de Canido junto a sus abuelos Nuca y Eliseo, sus tíos Tatiana, Seo, Marta y Turi, su primo –y primer "mejor amigo"– David, y sus papis. El Señor –o Montesdeoca, o Santiago Pemán, o quien sea– nos preparó un día espectacular, la forma perfecta para comenzar a aprender cómo se disfruta la vida. El menú: cocido, precedido por pulpito, calamares, ensaladilla... acierto seguro –para el nené, Blemil Plus Forte 1, claro, que ya sería demasiada materia para el primer día de clase–.

La ocasión sirvió además para que Carlitos, Reyes, Veva y Rafa conocieran al enano. Chambo y Celia también estaban allí, y por fín "enfrentamos" a nuestros pichones: Emma y Javier. Dos auténticos figuras.

Después de comer, breve paseíto por el Vao como primer contacto –aunque leve– con la playa, y visita a casa de Turi y Marta antes de volver a casa. Esa noche se produjeron dos hitos: durmió 5 horas del tirón –récord absoluto– y se le cayó el ombligo.



Con Chambo y Emma –se colaron en la foto David, Turi y Joaquín–


Con los titos Seo y Tatiana


¡David le da unos besos!...


Con el tito Turi


Abuela Nuca, David y el tito Seo

Con Jane y Javier, titos y padrinos de su padre

"David, ¿cómo te ríes?... ¿y cómo te enfadas?"



No hay comentarios: