Pipo (Sportacus en la foto de la izquierda) lleva ya un par de meses de cole. La verdad es que tiene un horario complicado: entra a las 09:20h, sale a las 12:20h, vuelve a entrar a las 15:20h y sale a las 17:20h. Sólo varía cuando se queda en el comedor, dos días por semana para asistir a clases de inglis-pitinglis. Continúa yendo encantado (bueno, a veces al comedor no tanto), y ya habla de quiénes son sus colegas de trabajo: Manuel (especialmente), Sabela ("a veces si, a veces no"), André, Óscar o Lucas. La profe ya nos ha avisado de que "apunta maneras", sufre más castigos de los deseables e incluso un día nos avisó de que tuvo que llamarle la atención porque estaba revolucionando a las niñas de clase haciendo contrabando de juguetes en el baño junto a su compinche de fechorías... De momento, más cómico que preocupante.
Pero como no todo va a ser trabajar, Pipo aprovecha su tiempo libre para seguir disfrutando y haciéndonos disfrutar. el tío no para de hablar ni un segundo (el pobre no es capaz), y cuando sale a la calle parece un caballo desbocado. Continúa caminando de puntillas, es un fenómeno físico (todo lo que suponga ejercicio, ahí está él), está más tranquilo (salvo cuando se junta con su primo Vivís o con su prima Triana, que no hay quién lo pare) y hablando nos partimos de la risa sin cesar. Está en esa edad...
Dos cañones en Valença do Minho
De carreras por Pías (el primer ruedín le desaparecerá en breve)
Con el señor de los seguros, que a veces lo lleva al cole
Dos arenques en un cuatro latas
El enanito del bosque de Pías (¡árbol vaaaa!)
Exposición de Gormitis en el parque (sus juguetes favoritos)
Al cole todo orgulloso con su paraguas de Spiderman
