13 de septiembre de 2011: primer día de cole para Pipo. Sí, es martes y 13, pero Javier va como si le hubiera tocado la lotería. Contento por ir al "cole de mayores" (por fin, después de tanto pedir), contento por estrenar uniforme, contento... porque sí, porque él es así. De lo único que tuvimos que convencerlo es de por qué no va al mismo cole que su primo Vivís.Creo que si alguien siente algo similar a un trauma es su papi, porque si ya cuando se estrenó en la guardería me supo a "pobriño, ya ha entrado en la rueda", esta vez me da vértigo pensar los años que le esperan. Pero bueno, de momento, ¡prueba superada!
Sonrisa de "a punto de entrar en clase"...
...y sonrisa de "primer día superado" (OK!)
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