El resto del verano alternó días de playa (menos de lo que suele ser habitual) con días de piscina en Pías (ya con un solo manguito) y algún que otro evento especial, como el cumpleaños de Nico en casa de su tito Richiiiii. Allí los enanos disfrutaron con las habilidades de un payaso que hizo de ellos un pandero (que se dice por aquí). Intentando aplicar tanta objetividad como me permite mi enfermiza pipofilia, diría que Javier fue el que más se rió (incluso parecía sobreactuar a cada payasada del payaso). Si algún día se dedica a eso del espectáculo, leeremos todos esta entrada del blog y diremo eso de "ves? ya con poco más de tres años y medio apuntaba maneras".
Otro momento clave del verano fue la celebración de la boda de los Chambos en casa de Rosa (Francón). En ella, Pipo y la Periquita se llevaron el premio a los más lindos (y Amigo el premio al alma de la fiesta con doble ración de mérito).
En esta entrada poco más te cuento, salvo que intentaré añadir más cosillas cuando vaya encontrando huecos...
P.D.- El próximo 13 de septiembre empieza el cole...
Con Emma y Nico, atentos a las payasadas
Nico, intentando evitar que le arruinara la soplada de velas
Con la Periquita, en la celebración de la boda de sus papis
Poniendo el mundo del revés: paciente oscultando a doctor
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